18.2.06

ID4, te voy a soltar la chapa un rato

Hago una pausa en el análisis de las canciones Bond (en breve, más), porque ayer me vi Independence Day tras mucho tiempo sin verla, y la verdad es que me he quedado con ganas de comentarla.

La verdad es que pocas veces he visto una película con cosas que me hayan gustado tanto y otras que me hayan gustado tan poco, así que voy a analizarlas por separado para que veáis a qué me refiero.

Entre las cosas que me han gustado están:

- Los efectos especiales: La película es de hace ya 10 años, y aun así los efectos siguen siendo insuperables hoy en día. Hay que recordar que aunque usa muchos efectos especiales por ordenador, aún no eran tan populares como hoy en día, y muchos son hechos con maquetas.

- La música: David Arnold es uno de los grandes compositores que hay hoy en día, y en esta BSO se demuestra el por qué. Tal vez el tono tire un tanto hacia lo “himno”, pero es lo que pide la película, por otra parte.

- El argumento: Vienen los alienígenas. Patean el culo global de la humanidad. La humanidad se organiza y contra-patean el culo de los alienígenas hasta la próxima galaxia. Simple, directo, y sin más rollos, muy de Serie B de los 50.

- La dirección: Roland Emmerich no será un genio a la altura de un Spielberg o un Lucas (en los que obviamente se inspira), pero al menos no es un McG, un Michael Bay o un Simon West. Es capaz de rodar escenas eficaces cuando se trata de momentos de tranquilidad y algunas francamente impresionantes cuando toca, como la escena de la sombra de las naces sobre Washington y Nueva York, que ya es parte de la historia del cine, en mi opinión.

- El diseno: Tanto los extraterrestres como las naves tienen un magnífico diseño, gracias a Patrick Tatopoulos, un grandísimo diseñador de criaturas.

- Jeff Goldblum: Un grandísimo actor, en mi opinión (cualquiera que vea La Mosca puede dar fe de ello). Aquí en su papel de genio informático fanático del reciclaje, sabe dar una humanidad que algún otro actor (luego entro en el tema) no logra en su papel por mucho que lo intente.

- Brent Spiner: Siempre es agradable ver a Data no haciendo de Data. Y parece que tras hacer de androide frío y sin sentimientos, le apetecía hacer de científico medio chalado y nervioso para variar.

Y entre lo que no me ha gustado NADA están:

- El tono patriótico americano: Vale. Se llama Independence Day. Sucede entre el 2 y el 4 de Julio. Pero es que hay momentos en que parece que la tierra está llena de una panda de pusilánimes que no hacen nada si los EEUU no lo deciden. La verdad es que frente a una amenaza tan global, uno hubiera esperado una mayor variedad cultural entre los héroes, no que todos fueran Modelos de Comportamiento Norteamericanos. Y el discurso del presidente… Creo que es imposible que un no norteamericano lo oiga sin que le rechinen los dientes.

- La seriedad con la que está resuelta: Como decía antes, el argumento es de pura Serie B. Y lo que funcionaba con la Serie B es que no se tomaba a sí misma en serio. Sin embargo parece que en algunos momentos estén contando una gran historia de la humanidad, en vez de lo que realmente es, un divertimento de Aliens vs. Terráqueos.

- Bill Pullman: ¡Pero qué actor más rematadamente malo es este tío! No es capaz de ser emotivo en ningún momento, ni cuando se muere su mujer, ni cuando suelta el famoso discursito, ni cuando va volando en el avión… Vamos, penoso.

Pues eso, que si uno puede pasar de esas cosas (que, lo reconozco, es muy difícil), uno se encuentra con un entretenimiento eficaz y bien dirigido. Por lo demás que se queda sin comentar, está Will Smith (que parece que haga el papel que haga, ha ce convertirlo en “papel de Will Smith"), o el curioso hecho de que la Primera Dama acabara luego de Presidenta… aunque solo fuera de lo que queda de las 12 colonias de Kobol.

Y sobre el famoso gazapo del “virus compatible con el ordenador alienígena”… Si uno lo piensa, tampoco lo es tanto, al menos en la edición extendida. Pero ahora no tengo tiempo para ello, si acaso, y si sale el tema en los comments, lo hablamos ahí.